Y pensar que me habían dicho!!

Fuente imagen: Mujeres Cristianas.org

Hizo época en la TV uruguaya un aviso de una conocida grapamiel que recurría a esa frase como recurso publicitario. Muy efectivo para un país afecto a discutir todo y reconocer pocas veces los errores. La frase cae justo para identificar -una vez más- una situación en la que pareciera necesario escuchar voces de otros países para dar por bueno lo que ya habían advertido las autoridades sobre la materia en cuestión. Bienvenida sea la instancia si con ella se termina de una buena vez de contradecir gestiones por mera gimnasia electoralista y empezamos -realmente- a recorrer un camino virtuoso de buenas prácticas. El caso refiere a la comparecencia del director nacional de Seguridad en Espectáculos Futbolísticos del Ministerio de Seguridad de Argentina a la comisión de Deportes del Senado de la República, donde dijo lo que ya había adelantado el Ministerio del Interior. Y pensar que se lo habían dicho!!...

Nadie es profeta en su tierra

Esa máxima se cumple a rajatabla en este “bendito país”; Bonomi y su equipo no serían la excepción a esa regla de no reconocer a propios pero batir palmas y elogiar a extraños. Porque, para ser justos con la realidad, lo que afirmó el experto argentino no es otra cosa que conceptos afirmados por la cartera en cuanto foro u oportunidad tuvo, advirtiendo lo que hoy asumen sin cuestionamientos por venir de un “experto en seguridad extranjero”. 

Que los espectáculos deportivos son un evento privado y la seguridad es responsabilidad del organizador se repitió hasta el hartazgo por parte de las autoridades de la Secretaría de Estado, soportando el rechazo de la oposición política y los formadores de opinión que arengaban pidiendo la participación de la Policía como única responsable de lo que pasa en los escenarios deportivos.

Entradas con presentación de cédula de identidad, listas de admisión proporcionadas por los clubes y el retiro de la Policía de los estadios fueron las recomendaciones hechas por el experto argentino, confirmando que lo dispuesto por las autoridades uruguayas guarda relación con el contexto internacional y lejos de ser una improvisación -como llegó a tildarse en su momento- representa un cúmulo de medidas probadas en la región y el mundo donde se recogen resultados positivos en la materia.

“No hay que sacar el foco de que esto es un espectáculo privado y el organizador del evento -clubes y asociaciones de fútbol- deben ponerse los pantalones largos y estar a la altura del evento que están llevando a cabo”, dijo a Leonardo Luzzi de El Observador, el experto argentino, Guillermo Madero.

Es bueno que -actores invitados o extranjeros mediante- empiecen a darse cuenta que Uruguay cuenta con autoridades que están aggiornados a nivel global, y un paso adelante a nivel interno a estar por los cuestionamientos que todavía persisten en algunos operadores políticos que se niegan a reconocer los aciertos.

Las cifras de Cifra

Los datos son contundentes pero la miopía es una epidemia en una clase política que no acepta logros y menos si estos son fruto del trabajo de un Ministro al que cuestionaron siempre. No pueden permitirse ningún reconocimiento, aunque hay actores que, (por algún descuido, seguramente), empiezan a reconocer la baja del delito.

Lo cierto es que si hay algo que empieza a imponerse -a pesar de esa oposición- es la realidad del comportamiento delictivo que empieza a dar muestras de ceder ante el trabajo policial. El PADO y su nuevo modelo de patrullaje basado en la evidencia y la adecuación a los mapas de calor que marcan los puntos calientes, junto a medidas legislativas y la video vigilancia, son instrumentos que se consolidan cada vez más a medida que la fuerza policial adquiere más experiencia en el manejo de las nuevas tecnologías y metodologías de trabajo.

Una encuesta de la empresa Cifra, difundida hace pocos días, arroja que 1 de cada 10 hogares sufrió algún robo, (encuesta realizada entre el 17 de febrero de 2016 y el 1º de marzo de 2017). "Uno de cada diez hogares en todo el país sufrió algún robo, de ellos, la mayoría sin violencia. Esto corrobora lo que decían el ministro Bonomi y el presidente Vázquez", dijo la representante de Cifra en Telemundo Mariana Pomiés (nota de El País del 21 de marzo).

En buena hora llega este comentario ya que cada vez que el ministro Bonomi anuncia datos positivos en materia de evolución del delito, salen a cuestionar las cifras o relativizar los logros, haciendo un flaco favor a la sociedad uruguaya que necesita bajar el nivel de percepción de inseguridad que ostenta.

Los datos son contundentes y empiezan a consolidar una tendencia a la baja provocada por una actuación policial que se hace visible en las estadísticas.

Aquella publicidad de la espirituosa y acaramelada bebida sigue vigente, y vale para una realidad uruguaya que cuenta con gestores que hacen caudal de su experiencia y conocimiento a pesar de no ser reconocidos… hasta hoy.

Y pensar que se lo habían dicho...

el hombre apuraba un trago,

el perro ladró un aviso...