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miércoles, 22 de agosto de 2018

Hay fiesta en el comité

Se juntan sin pedir permiso, se organizan para mejorar sus instalaciones, viven haciendo finanzas y no desperdician ocasión para sacar algún “vintén” que ayude en la compra de materiales o pintura para ejercer la democracia en cada muro. Son los militantes, los que no abandonan, los que abren a cualquier hora las puertas de sus locales, y son los mismos que las cierran a altas horas. Construyen la utopía en cada reunión, y la destruyen en la siguiente, cuando la sustituyen por una mejor, discutida entre todos. Se convocan en su local, ese santuario donde se escucha fuerte y clara la voz de las bases; el lugar donde ejercen ese derecho sagrado a participar de las decisiones. Son la máxima expresión de la democracia directa, de la que nos sentimos orgullosos los frenteamplistas. En tiempos de posverdad y posmentiras, hay que volver a las raíces de nuestra mejor historia, esa que invita cada 25 de agosto a disfrutar la fiesta del Comité de Base...