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jueves, 12 de noviembre de 2015

La culpa no es del perro

... sino del que no levanta su caca.

Por fin podremos disfrutar de nuestros espacios públicos como queremos! Los montevideanos dejaremos de andar a los saltos por la rambla o por las plazas de la ciudad, esquivando “soruyos”. Aunque con ello disminuyan las probabilidades de prosperidad económica por aquello de que “pisar mierda trae buena suerte” que canta Serrat. Lejos de esa expresión popular, la Intendencia de Montevideo se propone complicarnos la suerte disminuyendo las posibilidades de pisar las deposiciones perrunas (que no dejan de ser inmundas por más que traigan la posibilidad de mejorar nuestras esperanzas quinieleras). Lo cierto es que a partir de esta semana que pasó, los perros tienen (tenemos) menos oportunidades de evacuar como hasta ahora... ¡La “guau” madre que los parió!