Promesa de campaña
Se vienen las votaciones,
octubre ya está llegando,
y la venimos remando,
entre fiestas y emociones.
Garanto que no hay rincones
del país que se promueve
ande el ambiente se mueve
con toda la botijada,
que lleva como pegada
la lista 609...
Entre caravana y agites
a mi pareja dejé
con un vecino que fue
a ofrecerse pa’l convite.
Yo tenía algún palpite
de que la diosa fortuna
me daría chance alguna
pa’ liberarme ese lastre,
y por suerte y sin desastre,
él la cuida y la vacuna...
Yo la tengo producida
con colores partidarios,
también luce escapulario
con nombre, si está perdida.
La quiero y ella es mi vida,
me siento correspondido,
al punto que su gemido
es puñal que se me clava.
Ella me abriga y me lava...
¡Es lindo ser tan querido!
Yo pa’ verla -y pa’ seguirla-
le puse sobre su espalda
un pegotín, cual cocarda
y así poder distinguirla.
Por si alguno me la birla
vaya sabiendo: NO PUEDE!!
si ella está quieta o se mueve
cual GPS en su lomo,
va un pegotín policromo
que dice: 609...
Es tierna y abrigadita,
cariñosa y bien formada;
tiene las uñas limadas,
la piel blanca y suavecita.
Sus costumbres favoritas
son mis mejores momentos
y hay cosas que ni las cuento
porque ella no me deja.
Sueña con ser madeja
y sin hacer aspavientos...
Yo le prometí -de boca-
que con Pepe Presidente,
le compraba un par de lentes
y la llevaba de copas.
Mis ausencias le provocan
crisis que ella refleja.
¡Me muero si ella me deja!
Por eso vi’a compensarla...
pa’ mi es difícil dejarla...
¡Es mucho más que una oveja!!
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