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(*Insp. Ppal. Mario Layera, designado nuevo Jefe de Policía de Montevideo)
Hundiendo el bisturí
El rumor ganó las redes, los teléfonos no pararon de sonar en busca de confirmar lo que el propio renunciante ya había confirmado a sus subalternos en reunión privada mantenida en la propia Jefatura de Policía de Montevideo. El día previo ya se había consumado la presentación de la carta de renuncia al Ministro y éste había aceptado la misma no sin rescatar el alto grado de compromiso asumido por quien estuvo al frente de un proceso refundador de la Policía capitalina.
El propio Bonomi confirmó la confianza en el renunciante en conferencia de prensa que tuvo la lectura de la carta remitida por Fernández y que incluyó las conclusiones de una investigación impartida por aquel, las que dieran motivo a los sumarios impetrados contra cinco funcionarios de la Secc. 14a., con denuncia penal incluida.
El estratégico plan diseñado por la administración sigue adelante y las piezas de este ajedrez se mueven al ritmo de lo planificado. La reestructura es un hecho y consolidarla será la principal tarea del Jefe entrante.
"Hay que hundir el bisturí a fondo" - expresó Bonomi a los medios, en referencia al momento que toca vivir a la Jefatura de Policía de Montevideo, y en especial a quien deja el cargo habiendo "hecho todo lo que pudo, poniéndose la reestructura al hombro". Ahora es el momento de profundizar los cambios y llegar al núcleo duro de una reforma que necesita imperiosamente consolidarse donde se juega el partido: en los barrios de la capital. Allí el compromiso es doble, porque a la función esencial de la Policía se suma el compromiso con la gente con quien comparte el vecindario, y la tan anhelada integración de la Policía con los vecinos debe tener un punto de encastre que se solidifique definitivamente.
Esa descentralización operada hace ya más de un año necesita tener correspondencia en cada Comisaría de Montevideo, allí donde el vecino precisa contar con un espacio de confianza que le permita sentirse y saberse protegido. Ya no hay más tiempo para seguir escuchando excusas y la frase "no tenemos móviles" debe ser desterrada por completo, por la simple razón de no ser cierta.
Viene siendo hora ya que se honre el compromiso asumido, la ciudadanía hizo su aporte, toca el turno a la Policía confirmar que son solo algunos malos funcionarios los que se rehúsan a cumplirlo. Justificarlos -como pretenden algunos colectivos que salen al cruce- es un error que no está dispuesto a admitir esta administración. La ciudadanía no puede quedar indefensa por la omisión que hagan algunos malos representantes de esta fuerza.
En ocasión del acto por el 1° de Mayo, se escuchó al cierre de la parte oratoria una brillante declaración de Richard Read, "el mejor sindicato no es es el que más huelgas hace sino el que más labura...", nunca mejor expresado. Solo falta que le hayan escuchado los que intentan defender a los que no cumplen con esa prerrogativa.
Un investigador al frente
La impronta de quien asume en esta etapa que se inicia es bien clara, bajo ningún concepto se aceptarán excusas que pongan en riesgo la seguridad de los vecinos. Y recuperar la confianza y el respeto de la población será su objetivo, "yendo a todas las denuncias... aunque sea a pie" (BUSQUEDA- 2/5 pág. 20).
Es hora de honrar los compromisos asumidos y desde la cartera ya se anunció claramente que no se aceptará otra opción que la de prestar auxilio al requerimiento de la ciudadanía.
Al ex director de la Dirección General de Represión al Tráfico Ilícito de Drogas le sobran pergaminos para asumir un cargo que si algo ha tenido es un alto poder fagocitante para quien lo ocupa.
Su perfil de investigador y líder de grupos que se desenvuelven en áreas sensibles lo han calificado para el puesto en este momento.
El desafío es grande, y prepararse para el mismo ya es parte del trabajo que viene realizando el novel Jefe designado junto al Director de la Policía Nacional - Insp. Ppal (R) Julio Guarteche- en la confección del equipo que le acompañará en su gestión.
Del equipo que conformen dependerá en gran parte una tarea que deberá terminar este período con la consolidación de la baja (ya lograda por el Jefe saliente) de los delitos que más atormentan a la población, como son la rapiña y el homicidio.
Experiencia le sobra a un Policía que sabe articular y gestionar equipos, y que necesita tener ese ida y vuelta con la población montevideana para que la confianza vuelva a ser insumo principal de la relación con la gente.
Que lo pueda hacer también dependerá de cada uno de nosotros, porque a la seguridad la construimos entre todos.
el hombre armaba el equipo,
el perro apoyó ladrando...
Me gusta cuando las personas se reunen e intercambian
ResponderEliminarpensamientos . Gran blog . Continúa así !
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