La discusión presupuestal sigue estando presente en la agenda diaria y no es para menos; se trata de la ley más importante de todo gobierno porque es la ley madre que compromete la gestión y de la que depende el futuro de los uruguayos por los próximos cinco años. Particularmente, esta ley, viene muy comprometida por un escenario heredado de una gestión multicolor que dejó la caja vacía y los compromisos excedidos mucho más allá de su vencida administración. Ese contexto no termina de convencer a muchos que siguen aferrados a las consignas y aspiran a que los porcentajes prometidos se cumplan. Sin dejar de entenderlos por la necesidad y la urgencia, es hora de hablar en plata y poner en cifras los reclamos para explicar que aún cuando no se llegue a contemplar lo reclamado, si la torta crece la porción también...
