Se acabó el recreo!! Así no más, era tan fácil que resulta inexplicable haber esperado tanto tiempo para concluir que bastaba con esa sencilla acción. Pero no, por ahora y hasta el 2 de marzo -en que asuman las nuevas autoridades- el “recreo” vive y lucha todavía. A decir verdad, semejante concepto resulta ofensivo para quienes asumen la función policial con responsabilidad y arriesgan su vida por cumplir el juramento que los convirtió en Policía. No hay, no existe tal estado de situación que haga siquiera por aproximación, creer que a los delincuentes se les permite actuar sin consecuencias. Decir eso afecta a los buenos policías -que los hay y son la inmensa mayoría- esos que arriesgan cada día su propia vida enfrentando al crimen. Afirmar eso afecta a los uniformados que abatieron a más de 31 delincuentes y no sufrieron ninguna consecuencia legal por su actuación conforme a la ley. Sinceramente, podrá ser muy marketinero el término pero ofende -innecesariamente- a la Policía Nacional...