Fuente imagen: Con la cámara en el bolsillo |
El principal enemigo de los narcotraficantes, el que lidera la "lucha frontal" contra los que lucran con la desgracia de miles de jóvenes uruguayos que padecen una adicción letal a las drogas, no ha tenido mejor idea para trasladarse que utilizar un vehículo incautado que perteneció nada menos que al narco más peligroso de este país. No importa si es un Audi Q5 del año 2011 con 140 mil kilómetros o un OKm… da lo mismo. Es el auto de un narco que se paseaba por el Cerro y al que todos conocen como "el auto del Betito"; lindo mensaje, no? ¿Austeridad? Ni un poco… ¿alguno puede imaginar cuánto cuesta un repuesto para un coche de alta gama como ese? Pero volviendo al líder de la lucha frontal contra el narcotráfico, ¿es sensato abandonar el uso de un coche blindado por utilizar uno sin esa seguridad? Salvo que nos estén mintiendo descaradamente y no haya tal lucha, cualquiera puede imaginar un mínimo escenario de riesgo para quien nos lo han vendido como el paladín de la guerra a las drogas en el Uruguay. Sabíamos que habían sacrificado la profesionalización de la Policía por poner a simpatizantes partidarios pero esto parece demasiado. ¿Todo eso por pasear en un Audi?