"El fuego fue más rápido de lo que es razonable pensar"
(Carlos Lecueder Pte. Directorio Shopping Tres Cruces)
La verdad se impone siempre, más temprano o más tarde, siempre llega. Esta vez no hubo reparo para el argumento -que por lógico no merece objeciones- de la rapidez con que el fuego avanzó ante la presencia de elementos altamente combustibles. Sin embargo, en ocasión del incendio de la cárcel de Rocha, este argumento se puso en duda y se cuestionó la celeridad con que se actuó aquella vez por parte del personal policial a cargo del establecimiento de reclusión.
Claro está que ambas situaciones no son comparables por el resultado. Nadie duda en que la de Rocha fue una tragedia, ante la pérdida de vidas humanas, y esta vez (Shopping Tres Cruces), solo fueron daños materiales. Sin embargo las situaciones se comparan argumentalmente pues en esta, nadie cuestionó los dichos del Presidente del Directorio de la empresa que administra el Shopping de Tres Cruces. Y está bien que no se le cuestione pues el fuego es más rápido de lo que es razonable pensar cuando el escenario donde se desarrolla está conformado por materiales altamente combustibles, como ocurrió aquella vez en la cárcel de Rocha con la presencia de las "ranchadas". Así lo demostró la Dirección Nacional de Bomberos en su recreación de ambiente carcelario, que fuera filmado y cronometrado para develar la voracidad del fuego ante un escenario como ese.
Muchas veces la política -mal entendida- lleva a elaborar argumentaciones falaces que el tiempo se encarga de demoler. En este caso, fue un local comercial el que se encargó de demostrar en los hechos lo que aquellos Bomberos recrearon para probar que la emergencia carcelaria denunciada al inicio de esta administración no era, sino, una triste realidad.
De aquí en más ya no quedarán dudas sobre el tema: "el fuego... es más rápido de lo que es razonable pensar".
Claro está que ambas situaciones no son comparables por el resultado. Nadie duda en que la de Rocha fue una tragedia, ante la pérdida de vidas humanas, y esta vez (Shopping Tres Cruces), solo fueron daños materiales. Sin embargo las situaciones se comparan argumentalmente pues en esta, nadie cuestionó los dichos del Presidente del Directorio de la empresa que administra el Shopping de Tres Cruces. Y está bien que no se le cuestione pues el fuego es más rápido de lo que es razonable pensar cuando el escenario donde se desarrolla está conformado por materiales altamente combustibles, como ocurrió aquella vez en la cárcel de Rocha con la presencia de las "ranchadas". Así lo demostró la Dirección Nacional de Bomberos en su recreación de ambiente carcelario, que fuera filmado y cronometrado para develar la voracidad del fuego ante un escenario como ese.
Muchas veces la política -mal entendida- lleva a elaborar argumentaciones falaces que el tiempo se encarga de demoler. En este caso, fue un local comercial el que se encargó de demostrar en los hechos lo que aquellos Bomberos recrearon para probar que la emergencia carcelaria denunciada al inicio de esta administración no era, sino, una triste realidad.
De aquí en más ya no quedarán dudas sobre el tema: "el fuego... es más rápido de lo que es razonable pensar".