Fuente Imagen: subrayado.com |
13/4/2013:
- "No tenemos móviles… pero si nos vienen a buscar vamos…"
Mientras esto respondía un funcionario policial de la seccional 14ª, el móvil (que había estado operativo hasta las 20:52 de ese día), se encontraba a escasas 11 cuadras del incidente que motivó el llamado. Al mismo tiempo, por lo menos tres motos con sus respectivos choferes –que también estuvieron operativos esa jornada- fueron negadas argumentando carencia total de vehículos. Tanta desidia junta colmó la paciencia de las autoridades…
La reacción no se hizo esperar. La denuncia penal por una presunta omisión a los deberes inherentes a la función pública y abuso de funciones fue presentada este jueves en el Juzgado de Crimen Organizado de Primer Turno. La paciencia tiene límites claros cuando está en juego la seguridad de los vecinos de Montevideo…
Cuando los hechos tomaron estado público a raíz de la denuncia que hiciera una vecina de Carrasco que había denunciado la insólita situación descrita anteriormente, comenzó a gestarse una serie de acontecimientos que derivaron en el llamado a responsabilidad de los involucrados y a una investigación de urgencia de la Jefatura de Policía de Montevideo. Posteriormente, en conjunto con las autoridades ministeriales se resolvió auditar las 25 seccionales de Montevideo para constatar el estado del parque automotor puesto en tela de juicio por irresponsables servidores públicos que olvidaron honrar su compromiso para con una sociedad que hizo el mayor esfuerzo a la hora de dotarle de recursos.
Porque si algo se debe ser a esta altura es –por lo menos- agradecido con la ciudadanía que con sus impuestos realizó uno de los mayores esfuerzos que registra la historia de la cartera de Interior en la asignación presupuestal destinada a la seguridad de todos los uruguayos. Lo último que se esperaba eran actitudes como la descrita, donde a nadie importó una emergencia ciudadana y se incumplió con el deber de brindar protección a quien la solicitó.
El día viernes 19 de abril un canal de aire emitió un informe lapidario –sin recabar opinión a la Secretaría de Estado- sobre la situación vehicular de las Seccionales 11ª y 14ª, pintando un panorama desastroso en lo que refiere a la flota vehicular con la que cuentan dichas seccionales para el patrullaje en su jurisdicción. Esa misma noche se resolvió auditar a todas las Comisarías de Montevideo y al otro día – sábado 20 de abril- autoridades de la Jefatura de Policía de Montevideo y del Ministerio, se constituyeron en las Seccionales referidas para conocer de primera mano la situación que se describió aquel viernes.
Las auditorías reflejaron otra realidad muy diferente a la que presentó aquel medio, y lo que era una falta de vehículos notoria terminó siendo menguada por la constatación de una flota vehicular que estaba operativa en número muy superior al narrado por el periodista.
Pero la gota que desbordó el vaso fue la comprobación absoluta de la existencia de móviles plenamente operativos aquel sábado 13 de abril en que fueron requeridos por una vecina de la calle Rivera y Deauville, siéndoles negados impunemente por un irresponsable funcionario que, a todas luces, quería abandonar el turno.
Efectivamente fue gracias a los controles cruzados que permite la tecnología incorporada al servicio de la gestión, lo que permitió llegar a la verdad. El día 13 de abril de 2013, un vehículo policial asignado a la Seccional 14ª estuvo plenamente operativo a la hora en que aquella vecina requirió presencia policial y sin embargo se negó su existencia. Fue gracias al SISCONVE (Sistema de Control Vehicular), que la cartera pudo reconstruir el recorrido histórico del mismo, merced al DPL (GPS) que tiene incorporado al tanque de combustible y por el cual se pudo apreciar el derrotero de ese móvil que no fue invocado para acudir al llamado.
Asimismo la seccional cuestionada contaba con motos (siete de ellas 0k), que hacen parte de una de las flotas más numerosas asignadas a una seccional. “Más que un problema de gestión es un problema de intención”, manifestó Bonomi a la Secretaría de Comunicación de Presidencia, para referirse a la desidia manifiesta de infieles funcionarios que deshonran su uniforme y defraudan a la ciudadanía con estas actitudes.
La seguridad pública es un derecho humano, así se lo concibe por parte de esta administración y como tal será defendido por todos los medios disponibles a su alcance. Así es que toda la tecnología adquirida e incorporada será utilizada en función de garantizar el principal objetivo o misión de esta cartera, que no es otra cosa que mejorar la seguridad. No es con actitudes de este tipo que se recuperará la confianza perdida sino con la defensa inclaudicable de ese derecho por parte de las autoridades, las que no están dispuestas a tolerar ningún exceso.
El 2 de marzo de 2010 dijo también Bonomi que todo el esfuerzo reclamado a la ciudadanía para dotar del mejor presupuesto a la cartera -ese que permitiría mejorar salarios, incorporar tecnología, armamento y flota- no sería gratis. En contrapartida, se reclamaría compromiso y dedicación a la fuerza policial.
El que no entendió el mensaje, no tiene lugar en filas de la Policía Nacional.
al hombre se le acabó la paciencia,
al perro también…
al perro también…
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