Carrera de varios tiempos

Fuente imagen: Human Rights Watch

El caso Carrera lleva casi tres años en un ambiente donde la judicialización de la política fue ganando terreno al influjo de los embates virulentos que han posicionado al “lawfare” en el mundo y muy especialmente en la región latinoamericana. Los casos de Lula y Dilma Roussef son los más emblemáticos pero no los únicos. Y como todo tarda (tardaba) pero llega, Uruguay no sería la excepción a esta regla impuesta por la derecha internacional, que no acepta derrotas electorales y persigue llegar al poder a cualquier precio. Tras un pedido de desafuero que lo llevó a renunciar a todo siendo el tercer titular de la lista más votada del país, y tras una escandalosa demora tras su pedido de desafuero, en 10 días se pisó un acelerador inentendible en el caso para imputarlo sin un estudio profundo y serio. Algo que luce claramente como una cancelación al político más combativo y denunciante de la mayor entrega de soberanía que registra la historia del país: la entrega del puerto por 12 períodos de gobierno a una multinacional belga.

Chip’s

Fuente imagen: Doblaje Wiki

¿Se acuerdan de Poncherello? Era uno de los protagonistas de la por entonces famosa patrulla motorizada que veíamos en blanco y negro por estas latitudes (CHIPs). Hoy son otros tiempos pero la idea de dotar de chip’s a las motos uruguayas para su control me trajo el recuerdo de aquella serie. La idea es criticada por algunos usuarios que se resisten a entender que las tecnologías no solo vinieron para quedarse sino que son imposibles de eludir. Ignorarlas sería una forma muy primitiva de amputarnos una solución que mejoraría la seguridad pública con controles remotos, automáticos y sin necesidad de intervenciones violentas de la policía. 

Comunicando desde la Torre Ejecutiva

A pocos días de cumplirse los primeros 100 días del cuarto período frenteamplista, la comunicación oficial está en el centro de la agenda y no precisamente por su eficacia. Decenas de periodistas que pasaron a cumplir funciones para el Poder Ejecutivo no han dado el resultado que en principio esperábamos y, en cambio, se ha padecido de cierto estancamiento de la información oficial en lo que a gestión propiamente se refiere. Lamentablemente, la agenda la marcaron las renuncias de autoridades que no llegaron a calentar el sillón de sus despachos y no lo que hicieron o dejaron de hacer. Ni el presidente Orsi se salva, quien se ha visto abrumado por ruedas de prensa desordenadas que no apuntan a informar sobre la gestión propiamente dicha.

Éramos tan libres...

Hace pocas horas el Centro de Archivo y Acceso a la Información (CAINFO), emitió un comunicado de condena por las “presiones indebidas” ejercidas por el titular del grupo Magnolio, Francisco de Posadas, para que no se publicara una información sobre un atentado sufrido contra su coche en el frente de su residencia del barrio Carrasco de Montevideo. No por reiterado deja de ser preocupante, pues no hace mucho tiempo atrás periodistas del diario El Observador denunciaron un acto de censura ejercido desde la Torre Ejecutiva.Y muchos recordamos las expresiones del extinto Tabaré Vázquez a poco de asumir su gobierno sobre los “llamaditos” que metían presión a los medios de prensa. En fin, éramos tan libres...

Un Ejército… de salvación

Fuente imagen: Subrayado

En el mes de la memoria como se le reconoce al Mayo uruguayo, no solo la Marcha del Silencio se da cita sino que hay históricos acontecimientos que se emparentan con el simbolismo dado a estos especiales 31 días del año oriental. A estas alturas nadie puede negar la triste participación que le cupo a las Fuerzas Armadas uruguayas en la tortura, muerte y/o desaparición de los 197 desaparecidos que todavía seguimos buscando. Y es, precisamente, en este mismo mes que se conmemora el Día del Ejército (el 18), tomando como referencia la actuación histórica del ejército artiguista en la Batalla de Las Piedras. Hoy quise unir ambas circunstancias en una especie de mecanismo de reconciliación que permita ir cerrando las heridas que -indiscutiblemente- seguirán abiertas mientras no sepamos el destino de todos los que aún seguimos buscando.

“Naides es más que naides”…

La muerte lo andaba buscando hacía mucho y como pudo se las ingenió para escaparle. Lo que no pudieron las balas ni la tortura de la dictadura lo pudo el tiempo, ese que transcurre de forma inexorable para todos. De todos modos, ese mismo tiempo le dio la chance de reinventarse al punto de alcanzar internacional destaque para envidia de muchos que lo negaron en su propia comarca. Nadie es profeta en su tierra, pero Pepe burló esa máxima porque –aún a pesar de algunos- estuvo a la altura de un pueblo que se sintió representado y de un mundo que lo reconocerá por siempre como un estadista de monumental estatura. El pueblo uruguayo y el mundo ya lo lloran, al tiempo que empieza a construirse el mito de su trayectoria junto a la inmensa fila india (la barra) que estará a la altura de su memoria para que “naides sea más que naides”...