La culpa es del Pato Celeste!

Nos Vamos (Uruguay) de los cargos...

Finalmente Pedro impuso su criterio al sector y sus dirigidos abandonarán los cargos que pusieron “a disposición del gobierno, renunciando a los mismos”. Vaya forma original de decirlo, alcanzaba con decir que presentaban renuncia y listo, sin necesidad de puesta a disposición alguna. Pero en el fondo de todo esto, develamos un misterio oculto: la culpa de todo la tiene el Pato Celeste!

La primera dama había pegado fuerte, "si nos declaran la guerra y ellos mismos dicen que rompen los puentes con el gobierno que se vayan de los cargos", expresó en Radio Sarandí y recogía Montevideo Portal. Eso bastó para generar una andanada de manifestaciones desde filas opositoras en las que cada uno tenía su minuto de fama buscando ver quién era el que apostaba más alto.

Fiel a su estilo, el Senador Pedro Bordaberry adquirió un nuevo tema (agradeciendo a Topolansky por la iniciativa), ya que venía medio mal sin nada para salir a debatir con titulares. Esta acción le venía como anillo al dedo, abriendo un debate y dejando en incómoda posición a los blancos que le habían disputado su buque insignia: la seguridad pública.

Como buen lector, Pedro se dio cuenta rápidamente que en materia de seguridad se comienzan a ver los resultados y tenía que apurar un frente nuevo para mitigar la caída en las encuestas que lo tienen por el piso hace rato. No podía disimular tanto agradecimiento y el dominguero columnista tuvo nuevamente un tema para marcarle la agenda a la troupe opositora que lo siguió al toque.

Por más que ahora salgan blancos, (y algunos colorados), a justificar su permanencia en los cargos, el ilustre columnista los dejó en offside una vez más con semejante acto de desprendimiento colectivo. Claro que sería también una buena cosa que rindieran cuentas de lo actuado durante su “estadía” para poder completar un cuadro de situación sobre lo que aportaron o dejaron de aportar durante su gestión. Que si vamos a jugar que sea por todo y con todo, ¿no?

La cuestión es que abandonarán los cargos solamente los siete representantes de Vamos Uruguay, ya que ni Proba ni Uruguay es Posible, dejan “la teta”, con lo cual tuvieron que salir a justificar su decisión.

En suma, que el lío que armó Lucía y del que luego ironizó el Presidente Mujica, dejaron en evidencia varias cosas:

1.los colorados (divididos), marcando perfilismos claros y pujando por encontrar ese tema que los levante en las encuestas (hasta ahora sin éxito, claramente);
2.los blancos, alejándose del tinte rosado que los invadió durante un tiempo y tratando de marcar posición en una instancia de puja electoral interna, (de la que el Guapo reafirma el liderazgo, pero sin crecer tampoco).
3.El Frente Amplio, por su parte, orejea la instancia no sin recordarles que durante los gobiernos blanqui-colorados de antaño, miraron con la ñata contra el vidrio sin que nadie de los que hoy se agravian, hiciera el menor gesto de ofrecer participación en los entes.

Por mi parte tengo mi teoría: la culpa de todo es del Pato Celeste.

Un ser extraño, viajero incansable que no fue a Londres (por ahora), a pesar de haberlo puesto allí otro columnista diario, y al que se le atribuyen autorías varias en acciones de gobierno. Semejante artífice político se merece un nuevo reconocimiento en un tema tan caro como este.

“Gracias Pato Celeste, por la gracia concedida”, se leerá en mensajes o solicitadas publicadas  para reconocerle semejante acción pública.

Total, siempre hay algún Judas a quien atribuirle el fardo, aunque éste se disfrace de pato pintado de un color que nos gusta a todos... menos, a los colorados.

el hombre contemplaba el circo,
el perro correteaba un pato por el fondo...